2 may 2010

Hoy...

Y allí estaba yo, en medio de todas esas personas…

Todos parecían seguros de que camino debían seguir y los no lo estaban, sólo necesitaban detenerse a mirar por breves instantes las señales para reanudar su marcha, seguros de la ruta que debían seguir.

Y yo, detenido en medio de todos ellos, sin saber si ir a la izquierda o a la derecha, divido por miles de motivos que no conducían a ninguna conclusión.

Trataba de buscar respuestas en aquellos rostros, en aquellas caras de las personas que sabían cual era el camino que debían tomar. Quería creer que tal vez encontraría la respuesta a mi simple pregunta en los ojos de alguno. Pero en vano busqué un motivo para decidirme… Inclusive, me llené aún más de dudas al mirar desconciertos en algunos ojos, incredulidad, zozobra y resignación. ¿Es realmente el camino que quería tomar o era el que estaban obligados a seguir?

Yo sabía que me decisión se reducía a dos sencillas opciones… Lo que quieres hacer y lo que tienes que hacer… Y miraba en las personas ciertos gestos que me hacían ver que con el camino donde sigues a tus deberes a veces es necesario sacrificar muchas cosas. Pero también percibía en algunos el orgullo derivado del propio sacrificio para cumplir las propias obligaciones.

¿Y qué veía en aquellos que parecían seguir el camino que querían? En algunos, la felicidad irrevocable de hacer lo que amas… En otros, el dolor de haber sacrificado, así como los que hacen lo que deben, todo en nombre de los placeres.

Me preguntaba por qué no podían ser un mismo camino el que quieres y el que debes… Seguro alguno de los que pasaba frente a mí había tenido esa opción y la seguía. ¿Debes hacer lo que quieres o debes querer lo que debes?

Aún estoy parado cerca del lugar de donde partí. No he avanzado demasiado. A veces, decido que tengo que ir por el camino del deber, pero me detengo y reflexiono que sería mejor hacer lo que quiero… Camino unos pasos de regreso y me doy cuenta que será mejor seguir por donde debo… Y así pasan los años sin avanzar demasiado entre el deber y el placer…

Pero hoy siento que es el día de romper mi estática… Hoy debo hacer lo que quiero y haré lo que debo… Hoy no iré a la izquierda ni a la derecha, iré de frente… Hoy romperé, amaré, haré, disfrutaré, buscaré, conseguiré, destruiré, observaré, construiré, alimentaré, amarraré, apartaré, impondré, liberaré mi camino…